Sanciones de EE.UU: Navieras griegas cesan transporte de petróleo ruso

Introducción

Tras un intentado movimiento de desequilibrio lanzado desde Estados Unidos, las empresas navieras griegas que parecían ser las propias Reinas de Amazonas en el transporte de petróleo ruso, han decidido hacer mutis por el foro y abandonar esta partida. Nos referimos a Minerva Marine, Thenamaris y TMS Tankers, que en lugar de desafiar con arrojo las sanciones estadounidenses, han decidió cambiar de mesa de juego.

• Este nuevo golpe bajo del gobierno norteamericano al cuerpo robusto de Rusia, ha provocado que estas navieras helénicas mengüen su apuesta desde septiembre-octubre, en medio de las artimañas sancionadoras y los atractivos contratos petrolíferos. Aunque, recalquemos que pese a este zarpazo que parece jugar a la rayuela con las legislaciones comerciales internacionales, los comerciantes manifiestan que el gigante eslavo aún tiene suficientes compañías navieras a su servicio.

• Tal vez, en su desesperado impulso por minar los beneficios de exportación rusos, la administración norteamericana recargó sanciones a las empresas marítimas que transportaban el petróleo ruso por encima de los 60 dólares el barril. No obstante, una chispa de ironía aderezada con un pedazo de realidad evidencia que el crudo Urales, el buque insignia de las exportaciones rusas, cotiza por encima de ese límite desde mediados de julio. ¡Buen gancho! ¿Podría ser que estas restricciones, en lugar de cohibir, están potenciando un mercado clandestino del petróleo?

• En este marco, los fletes comerciales con petróleo ruso se tornaron una golosina muy codiciada para algunas entidades. Estas provocaron ingresos récord el pasado año para aquellas compañías aventuradas que se atrevieron a permanecer en la brega. Y es que a fin de cuentas, quien no apuesta fuerte, no se lleva el gato al agua. Así pues, seguimos jugando al borde del final.

Sin embargo, ni todo está perdido para Rusia, ni mucho menos. A pesar de la merma de los griegos, el titán eslavo ha echado el resto, demostrando una vez más que no camina solo en esta liza, apoyado en su naviera estatal Sovcomflot y diversas empresas asentadas en Emiratos Árabes Unidos, India, Hong Kong, Seychelles, Ghana y más parajes. Todo apunta a que aún queda mucha tela que cortar en este conflicto, ¿Qué será lo próximo? ¿Un tanto a favor, o uno en propia meta para Estados Unidos? El futuro lo dirá.

Sanciones de EE.UU a las exportaciones de petróleo ruso

Claves cruciales del mercado de petróleo ceden gradualmente a los embates procedentes del exterior: las sanciones estadounidenses

Vamos a explorarlo.

• Las empresas navieras griegas líderes en el transporte de petróleo ruso, Minerva Marine, Thenamaris y TMS Tankers, que antes considerábamos peones imprescindibles en la partida del oro negro de Rusia, han decidido dejar de transportar el crudo ruso.

• Estas compañías griegas parecen tomar en serio la leyenda de la caja de Pandora. No desean abrir la puerta a los problemas que podrían enfrentar debido a las sanciones estadounidenses

• Un cambio significativo, sin duda, impulsado por las decisiones de Washington, que se materializa en una disminución global del transporte del petróleo ruso, un movimiento de enormes proporciones.

En esta partida de ajedrez geoeconómica, las jugadas de Washington, desde las primeras sanciones a propietarios de petroleros en Turquía y los Emiratos Árabes Unidos, hasta la barrera de $60 por barril propuesta por el G7 y las embarcaciones sancionadas la semana pasada, están redefiniendo las estrategias.

No obstante, las cosas no son tan sencillas en este ajedrez petrolero a escala global y se ha visto cómo el precio del crudo Urales, joya de la corona rusa, ha estado navegando sobre esos 60 $ impuestos como tope, a pesar del intento de limitación por parte de las decisiones del la OPEC+

Porque quien se arriesga, tiene posibilidades de triunfar. Y parece que los operadores dispuestos a soportar el coste de transportar el petróleo ruso no tienen miedo de la incertidumbre.

• Aunque la renuncia de las navieras griegas al crudo ruso pueda parecer una derrota, Rusia continúa en el juego

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• Otros transportistas, incluidos la naviera rusa Sovcomflot y empresas con bandera en Emiratos Árabes Unidos, India, Hong Kong, Seychelles, Ghana y otras ubicaciones exóticas, están dispuestos a seguir transportando ese preciado líquido negro

High stakes en el mar: las navieras y el petróleo ruso

Navegamos por las aguas turbulentas de las finanzas mundiales, donde una polémica entre las flotas marítimas y la industria petrolera rusa centra nuestra atención. La retirada de las navieras griegas Minerva Marine, Thenamaris y TMS Tankers, provoca un silencioso terremoto en la circulación de este preciado combustible que requiere su respectivo estudio. Así pues, desgranemos esta ola sísmica que afecta al mapa geopolítico del petróleo.

• La posición de las empresas navieras griegas

  Con gran decisión, las navieras griegas decidieron cesar su colaboración en el transporte de petróleo ruso, en seña de protesta a las sanciones estadounidenses. Un cambio radical de táctica que ocasionó su alejamiento a partir de septiembre-octubre y que dejó huella en más de un protagonista en este retablo de mercados financieros. Esta elección supone un obstáculo insalvable para el predominio petrolífero ruso, al ver reducido el arsenal de flotas que pueden distribuir su ‘oro negro’ a los consumidores ansiosos de Asia, Turquía, Oriente Medio, África y Sudamérica. No obstante, Rusia dispone todavía de bastantes empresas de transporte… por el momento.

  Hablamos de un tablero de ajedrez naval donde estas navieras, fieles a su legado, eran piezas fundamentales. Controlaban magníficas flotas de más de 100 petroleros, capaces de atender casi todas las exportaciones de petróleo desde los puertos europeos de Rusia, lo que se traduce en unos 24 millones de barriles por día entre sus redes. Para darle más sabor, también gestionaban un conjunto de petroleros más pequeños para el transporte de combustible. Diversificar el riesgo, una estrategia sabia, ¿verdad?

  Pero, aunque las empresas griegas hayan cesado su actividad, es momento de recordar que no existe vacío de poder que no sea ocupado por alguien más.

• Flotas que suplen la ausencia

  La retirada de las compañías navieras griegas ha desencadenado una serie de movimientos de empresas marítimas dispuestas a ocupar ese vacío. Rusia, maestra en la estrategia del ajedrez, da un paso al frente con empresas como Sovcomflot, la joya del soberano Putin, y una serie de empresas de menor perfil registradas en los Emiratos Árabes Unidos, la pujante India, el lejano Hong Kong, las paradisíacas Seychelles, y hasta en el corazón de Ghana, entre otros.

  Entretanto, el negocio del transporte del petróleo se ha tornado un terreno minado de riesgo y escasos beneficios, más propio de una ruleta rusa que de las pacíficas aguas que en tiempos menos convulsos permitían tarifas sustanciosas por recorridos que incluso ascendían a los $15 millones por transportar una carga desde los puertos bálticos hasta la India. Aquellas épocas de beneficios récord ahora parecen tan solo el eco lejano de una melodía.

  Como se puede apreciar, la maraña intrincada de las rutas marítimas del petróleo no cesa de transformarse, y con ello, los vencedores y vencidos en esta apuesta de alto riesgo. La única certeza es la incertidumbre y la continua búsqueda de alternativas que permitan mantener el flujo del crudo en un escenario siempre mutable, donde los riesgos y las ganancias son inseparables.

Conclusión

Este episodio reciente en el drama del crudo parece sacado de una obra de misterio. Para empezar, las sanciones estadounidenses, en un esfuerzo por aguarle la fiesta a Rusia, han limitado su habilidad para exportar petróleo. Simultáneamente, tres destacadas y audaces empresas navieras griegas, que hasta no hace mucho continuaban transportando petróleo ruso, deciden desistir de su osadía y cambiar sus rumbos hacia aguas legalmente más serenas.

• Aquí es donde entran en escena los antagonistas de esta historia, navieras disconformes y dispuestas a asumir riesgos, tomando el relevo y con ello la responsabilidad de mantener en funcionamiento la maquinaria petrolífera rusa.
• Y la realidad es que, a algunos, les ha ido muy bien con esta decisión, si tenemos en cuenta las generosas ganancias obtenidas de estas peligrosas travesías.

Un guiño de complicidad se vislumbra en los récords de ingresos alcanzados por estas empresas el pasado año.

• Pero si la representación debe continuar, ¿qué les depara a los protagonistas de este volátil mercado petrolífero?
• Las grandes empresas griegas que gestionaban gran parte de las exportaciones rusas han dejado un vacío significativo.
• A pesar de que no se prevén desastres, la reducción en el número de navieras dispuestas a transportar el crudo ruso amenaza la economía de Rusia y, por extensión, la global.

«Aunque es factible que el águila del Tío Sam esté empezando a mermar los ingresos por exportación de Rusia, aún queda por descubrir si estos pinchazos son suficientes para quebrantar la resistencia del oso ruso.»

De momento, la repentina retirada de estas empresas del comercio ha introducido un nuevo elemento de misterio en este ajedrez geopolítico.

• Desde luego, cuando se habla de dinero, nunca escasean los temerarios dispuestos a asumir riesgos.
• El mercado del crudo no es ajeno a nuestras tendencias más instintivas. «Al igual que en el viejo oeste, siempre habrá bandidos listos para desafiar la ley en pos de beneficios.»
• De momento, es como un juego de sillas al más puro estilo Moscú. Las navieras griegas han abandonado la fiesta, pero otras, sin duda, están aprovechando para tomar su lugar.
  Al final, todos deberán rendir cuentas. ¡Que empiece el baile!