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Introducción
- Aun así, no es necesario ondear bandera blanca todavía. Hay una aclaración importante que hacer: el aumento en gasto en útiles escolares no necesariamente se atribuye a una subida de precios, sino a un volumen mayor de compra.
- Pese a este destello de luz, el panorama sigue cubierto de nubes. La constante escalada de los precios del material escolar supone una presión financiera inmensa para numerosas familias.
- Se plantea el dilema: ¿debemos priorizar la calidad de los productos o el alivio de nuestro bolsillo?
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El aumento de los precios de regreso a clases
- Al igual que en el cuento de Alicia, la flexibilidad puede ser la solución para afrontar un nuevo curso sin remecer los cimientos de tu presupuesto.
- Entre los consejos para comprar útiles escolares destaca la búsqueda de marcas de útiles escolares más económicas.
- El ahorro en la compra de útiles escolares puede ser una estrategia clave para mitigar el impacto de este aumento en los precios de útiles escolares.
- La adaptabilidad puede ser fundamental para afrontar las necesidades de niños en edad escolar sin dañar la economía familiar.
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Consejos para el ahorro en la compra de útiles escolares
- Complacer los caprichos de nuestros hijos puede resultar costoso. A veces, los artículos de marcas de útiles escolares famosas, inspirados en los últimos éxitos cinematográficos o en los superhéroes de moda, terminan incrementando la cuenta. Recuerda, lo esencial es que estos útiles escolares sean resistentes y funcionales, no que lleven un logotipo determinado. Comprar artículos genéricos puede proporcionarte ahorro en la compra de útiles escolares importantes sin comprometer la durabilidad y eficacia de los productos.
- Zagorsky aconseja «mantener flexibilidad en las compras escolares«. No te limites a una lista estricta de productos. A veces, hacerlo puede terminar disparando los costos. Compara precios en varias tiendas e internet, y no descartes alternativas que quizás desconozcas. Ese paquete de bolígrafos de una marca no tan conocida puede resultarte igualmente funcional y a un precio más atractivo.
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Conclusión
- Planificar con antelación y ejercer flexibilidad pueden ser nuestros ases bajo la manga para combatir este embate y evitar que el inicio escolar desestabilice nuestras finanzas.
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La clave radica en tener claro dónde va cada centavo invertido y por qué.
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Y estoy seguro de que nuestros jóvenes valorarán más una cómoda lapicera de madera que una estilizada y cara. Que la vuelta al colegio no se traduzca en angustia financiera. ¡Guardemos algo para el café!
El regreso a clases se ha transformado en un desafío fiscal titánico para una multitud de padres. No hablo de colegiaturas privadas o costosos hobbies extraescolares. Se trata de ítems terrenales como papel y mochilas los que generan pesadillas financieras a madres como Lauren Cyr. Esta madre, estratega consumada en economía doméstica, ha tenido que orquestar una ingeniosa danza con su presupuesto familiar, buscando descuentos y distribuyendo la inversión en diferentes plazos. Un equilibrio digno del Cirque du Soleil ante la subida de precios.
El retorno a la educación presencial ha resultado ser un trago amargo para muchos hogares. Según un estudio de la Federación Nacional de Minoristas y Prosper Insights and Analytics, los gastos en compras escolares han tocado nuevas cimas: 890.07 dólares por familia, para ser exactos. Casi 900 dólares en papel, lápices y otros implementos escolares.
En esta encrucijada, tomemos en cuenta el consejo lúcido del profesor Jay Zagorsky de la Escuela de Negocios Questrom de la Universidad de Boston: flexibilidad. Apostemos por abandonar la lealtad a ciertas marcas de útiles escolares. El propósito es un estudiante satisfecho y un presupuesto que no sufra. ¿Conseguiremos ese equilibrio? La contienda ha comenzado.
Al enfrentar el desafío de las compras escolares, es fundamental tener un buen plan de gestión financiera. En un artículo previo «4 Pasos para Enfrentar la Inflación y Optimizar tus Finanzas Personales«, ya discutimos cómo enfrentar inflaciones y cómo optimizar nuestras finanzas.
En un planeta cada vez más parecido a la realidad que vivió Alicia en el País de las Maravillas, este regreso a clases se nos presenta como un desafío financiero, manejando presupuestos familiares que fluctúan de manera extraña y caprichosa. Testigo de ello es Lauren Cyr, madre de tres escolares: para ella, las compras escolares necesarias para esta vuelta a las aulas se han convertido en un auténtico desafío estratégico digno de un maestro del ajedrez, rastreando ofertas y distribuyendo los gastos. Pese a ello, los costos de todo, desde el material escolar hasta las mochilas, parecen llegar a cotas insospechadas, tensionando aún más su economía doméstica.
Son muchos los que, como Cyr, viven una realidad financiera digna de un cuento. Según una encuesta de la Federación Nacional de Minoristas y Prosper Insights and Analytics, una familia promedio con hijos escolarizados prevé gastar la cifra récord de 890.07 dólares en material escolar este año. Un gasto total desorbitado, que asciende a la increíble suma de 41.5 billones de dólares.
Y, al más puro estilo Carrolliano, existe un giro en esta historia: los consumidores indican que este aumento de precios se debe más a la adquisición de más materiales y de mayor costo, y no tanto a una subida general de precios. Como cabría esperar, la presión que ello ejerce sobre las economías familiares es notable. En un contexto similar, es notable cómo se manifiesta este fenómeno en el mercado inmobiliario.
Con la inflación en ascenso y el coste de los útiles escolares en constante subida, la adquisición de suministros escolares caros puede parecer un rompecabezas cada vez más complicado. Ante este escenario, el consejo del profesor Jay Zagorsky, de la Escuela de Negocios Questrom de la Universidad de Boston, es mantenerse flexible, buscando diferentes alternativas y marcas. Solo así, renunciando a ciertas rigideces, podrás hacer frente a este desafío sin que tu economía se vea asfixiada.
El gasto en material escolar puede ser un desafío, como ha experimentado Lauren Cyr, madre de tres hijos. Con el incremento de los precios (algo con lo que ya hemos discutido con respecto a la inseguridad alimentaria en el Reino Unido), ha tenido que realizar sus compras en distintos meses, buscando ofertas de forma intensiva. Muchos padres se encuentran haciendo malabares financieros, enfrentándose a una factura promedio de $890.07 dólares, según revela una encuesta de la Federación Nacional de Minoristas y Prosper Insights and Analytics.
Si esta situación te resulta familiar, aquí te dejo algunos consejos de Jay Zagorsky, profesor de la Escuela de Negocios Questrom de la `Universidad de Boston`, que pueden aligerar tu carga.
Afrontar la vuelta al cole no significa desembolsar una pequeña fortuna. Con estrategia, flexibilidad y una visión más enfocada en la funcionalidad que en las marcas, puedes satisfacer a los niños y proteger tu economía. Finalmente, recuerda el viejo dicho «no es más rico el que más tiene sino el que menos necesita«. En términos de útiles escolares, a veces menos es más: menos estrés, menos gasto y más ahorro.
En resumidas cuentas, el alza en los precios de los útiles escolares se traduce en un dilema financiero para las familias, particularmente aquellas a las que les queda poco margen en su presupuesto. Con cifras que rozan los 890 dólares por familia en estos productos, indudablemente se asesta un golpe a la economía hogareña.
No obstante, la desolación y el desconsuelo no son las únicas respuestas frente al costoso estante de útiles. La flexibilidad, como bien apuntaría nuestro colega Jay Zagorsky de la Escuela de Negocios Questrom de la Universidad de Boston, es un arma vital en esta pugna contra los precios altos. Renunciar a la última novedad en mochilas o estuches y optar por aquellos que ofrezcan un mejor equilibrio calidad-precio, es su consejo. De igual forma, reciclar y reutilizar útiles del curso anterior puede marcar la diferencia.
Así como observamos estos notables aumento en los precios de útiles escolares, es fundamental identificar que este patrón se repite también en otros aspectos de nuestro costo de vida diario.
Fuente de la noticia: https://www.cnbc.com/2023/08/04/back-to-school-shopping-prices-rise-for-backpacks-notepads-pens.html