Huawei fomenta producción secreta de chips para eludir sanciones de EE.UU

Introducción

Huawei Tecnologías, el panorama geopolítico se convierte de nuevo en un tablero de ajedrez, donde los movimientos son intrigas propias del mejor thriller de espías. Imagínate a un coloso de la tecnología, avanzando a la sombra, evadiendo las mallas regulatorias lanzadas desde más allá del Pacífico por la superpotencia norteamericana. Hablamos nada más y nada menos que de Huawei Technologies Co, la valerosa firma china que ha decidido sumergirse en el laberíntico y desafiante universo de la fabricación de semiconductores en China.

Impresionantemente, parece que Huawei ha escogido una estrategia digna de una novela de Le Carré, creando una serie de plantas de producción de microchips en su China natal, tan camuflada que podría pasar desapercibida hasta para las águilas más avistadoras del panorama americano. Este astuto movimiento para evitar las sanciones de EEUU estaría respaldado por un apoyo financiero del gobierno, que ha inyectado unos exorbitantes 30 mil millones de dólares, que son todo menos calderilla.«Empaquetó sus bártulos y salió de compras, adquiriendo fábricas ya existentes», al parecer tienen planes de crecimiento y están erigiendo tres nuevas plantas.

Todos estos movimientos al estilo ‘007’ vienen impulsados por un pequeño obstáculo que el Departamento de Comercio de los Estados Unidos decidió ponerle a Huawei en 2019.
Preocupados por cuestiones de seguridad, la firma china fue incluida en la particular lista de control de exportaciones de empresas con control de exportación por parte de los USA.
Esto significa que la mayoría de los proveedores tienen vetado proporcionar bienes y tecnología a Huawei, a menos que tengan las licencias de exportación correspondientes.

«Sea un riesgo para la seguridad, o no», lo que es indiscutible es que estas acciones han obligado a Huawei a mostrar su lado más ingenioso. Hay rumores de que si Huawei está creando estas plantas bajo otros nombres, podrían sortear las restricciones de las autoridades estadounidenses, obteniendo de manera indirecta los equipos necesarios de origen americano para la fabricación de chips. Astuto, ¿verdad?

Es un enigma fascinante al que desde Ficoach seguiremos el rastro. Por el momento, hagan sus apuestas y no olvides visitar nuestro artículo sobre los Cambios en la Gobernanza USDC: Coinbase Adquiere Participación en Circle para más insights relacionados.

Las consecuencias de las sanciones de Estados Unidos

Huawei tecnologías, sufrió un duro encontronazo con la Casa Blanca que resultó en un remolino económico para la empresa china. Fue, más bien, un remolino económico que dejó a la empresa china sumida en el caos. El motivo principal de este conflicto radica en las crecientes inquietudes de seguridad del Gobierno de Estados Unidos. Parece que los funcionarios en la esfera de Washington veían en la corporación tecnológica china una amenaza para la privacidad y la seguridad de los datos, aunque Huawei siempre insistió en su inocencia.

El punto de inflexión llegó cuando el índice acusador de EE.UU. se dirigió hacia la tecnológica, precipitándola en una situación de desgracia. En 2019, la compañía fue añadida a la lista control exportaciones del Departamento Comercio Estados Unidos. ¿Y qué significa ser miembro de este ‘club’ tan selecto? Esencialmente, cierra las puertas al comercio internacional, vetando todas las exportaciones.
Los bienes, la maquinaria y la tecnología estadounidense pasaron a ser inaccesibles para Huawei, a menos que recibieran licencias exportación. ¿Te imaginas estar en una partida de ajedrez y de repente pierdes tu torre, tu alfil y tu reina? Sigues en juego con tu rey, pero sólo puedes avanzar paso a paso. Así se sintió Huawei al estar en esta situación. Una táctica casi suicida que, sin duda, no fue bien recibida en las oficinas directivas de la empresa.
Sin embargo, si algo nos ha enseñado la historia es que las dificultades suelen ser un catalizador para la creatividad. Huawei se vio obligada a recurrir a su ingenio para encontrar soluciones a estas restricciones proveedores. Bajo la apariencia de otras empresas, Huawei comenzó la fabricación semiconductores China en sus propias instalaciones, y logró adquirir equipos estadounidenses de forma indirecta.
En un misteriosa trama digna de una novela de espías, Huawei comenzó una producción chips escondida para eludir restricciones gobierno EEUU. Ante este panorama, surge la pregunta: ¿hasta dónde llevará este conflicto tecnológico? ¿Serán las grandes empresas capaces de sobrevivir en este clima tenso de enfrentamientos y prohibiciones? Actualmente, parece que Huawei ha encontrado su flotador en medio del torbellino y seguirá operando gracias al apoyo financiero gobierno, la Asociación Industria Semiconductores, las plantas existentes y la construcción nuevas plantas.

Si te interesa conocer más sobre los efectos económicos de decisiones políticas, te recomendamos leer nuestro artículo sobre las ‘Caídas en Bolsas y Criptomonedas por Decisión de la Reserva Federal‘.

La respuesta de Huawei

Huawei ha respondido con firmeza y determinación a las embestidas provenientes desde las costas norteamericanas. En lugar de lamentarse, la gigante china ha esbozado un plan que parece sacado de un film de espionaje.

Esta es la versión menos conocida de Huawei. Con un apoyo financiero considerable por parte del gobierno -cifrado en unos insignificantes 30 mil millones de dólares- la empresa ha saltado al terreno de la fabricación de semiconductores con un ardor y habilidad que asombran. Si hay algo que Huawei demuestra una y otra vez, es su talento para revertir situaciones adversas.
Pero, vayamos al centro de la cuestión. De acuerdo a la información suministrada por la Asociación de la Industria de Semiconductores, Huawei se ha hecho con al menos dos plantas previamente existentes, y ha emprendido la construcción de tres más. Sin duda, una movida digna de admiración por su atrevimiento.
La táctica de Huawei es reveladora: si están erigiendo instalaciones bajo el nombre de otras empresas, podrían sortear las restricciones impuestas por los Estados Unidos y, por consiguiente, adquirir de manera indirecta equipos americanos para la producción de chips. Astuto, ¿verdad?
Resulta evidente que Huawei no se encuentra reclinada sobre sus laureles ante las dificultades, y con este plan, podría estar pavimentando su camino hacia la independencia tecnológica que tanto necesita. Huawei, por su parte, desestima de plano representar algún peligro para la seguridad, insistiendo constantemente en que su meta no es otra que continuar suministrando innovación tecnológica y calidad a sus clientes.
En toda confrontación, solo con el paso del tiempo podremos comprobar si las estrategias de Huawei dan sus frutos o si, por el contrario, los Estados Unidos contraatacan con un nuevo plan de juego. La partida de ajedrez internacional continúa en juego, con las piezas todavía en movimiento. Fascinante, ¿no es así? Que continúe el juego. Enlaza con nuestro reciente artículo sobre la Crisis Bitcoin.

El problema del suministro indirecto

Huawei tecnologías, esa colosal forja de innovación tecnológica, vuelve a ser portada gracias a su capacidad para lidiar con contratiempos inesperados. Y es que, señores, nuestro querido titán chino ha concebido un audaz plan para eludir las sanciones que el belicoso vecino del norte, los Estados Unidos, le ha impuesto. ¿La estrategia? Orquestar una red de producción clandestina de semiconductores. Pero no te preocupes si esta noticia te descoloca un poco, estamos aquí precisamente para desentrañarla para ti.

En retrospectiva, hace unos años, cuando las preocupaciones parecían ajenas a nosotros, comenzaron a aparecer los primeros conflictos. Estados Unidos decidió catalogar a Huawei en su lista negra de exportación, alarmado por una posible amenaza a su seguridad. Esta relación, más extensa que la lista de la compra tras dos semanas sin visitar el supermercado, excluye a la mayoría de proveedores que intenten enviarse mercancía con las empresas incluidas en ella, salvo que obtengan apropiadas licencias. Así, Huawei fue tildado como un «riesgo a la seguridad», etiqueta que ellos, cómo no, rechazan fervientemente. Aquí puedes aprender más.
Retornando a la actualidad, parece que Huawei ha decidido practicar el antiguo arte del mimetismo. Según informa Bloomberg News, en un movimiento que bien podría ser el argumento de un thriller de espionaje, Huawei está modelando su propia red de manufactura de semiconductores dispersa por toda China. Con respaldo financiero del gobierno tasado en unos suculentos 30 mil millones de dólares, parece a priori un buen plan, ¿no te parece?
Ahora viene el quid de la cuestión. Si Huawei está edificando instalaciones bajo el alias de otras compañías, ¿quién nos garantiza que no podrían estar usando el mismo truco para adquirir maquinaria de fabricación de chips de proveedores estadounidenses? Esta fulgurante táctica sería una astuta maniobra de distracción para esquivar las restricciones impuestas por Estados Unidos.
Por supuesto, esto perfora un hueco más grande que la Gran Falla de San Andrés en el sistema de restricciones de adquisición de Estados Unidos, y nos hace cuestionarnos: ¿qué otras trampas surgirá de este conjunto de ingenio, resilencia y finanzas que es Huawei? Igual que se suele decir, el que no apuesta no gana. Y, de momento, parece que quien está recogiendo las ganancias es Huawei.

Conclusión

En esta apasionante partida de estrategia y competencia, observamos cómo Huawei tecnologías, la poderosa empresa tecnológica china, se prepara y se defiende ante los embates de las sanciones impuestas por Estados Unidos. Nuestro personaje principal es una red de instalaciones de producción de chips, tan reservada que podría considerarse secreta, que funcionará como parapeto.

Con un apoyo financiero del gobierno estimado en la astronómica cifra de 30 mil millones de dólares, Huawei tecnologías se zambulle en el negocio de la fabricación semiconductores en China, en una partida de ajedrez a nivel mundial donde los peones son las complejas fábricas de semiconductores. Arrastrando los últimos rumores, consiguen dos de estas plantas existentes y están avanzando en la construcción de nuevas plantas. ¿Quién lo habría pensado? Huawei es una empresa de resultados rápidos.
Hay que remontarse a 2019, cuando Estados Unidos, en un gesto con claro matiz de disgusto, incluyó a Huawei tecnologías en su lista control exportaciones. Aunque la empresa asegura no representar un riesgo de seguridad, las normas del juego geopolítico parecen tener un guion diferente al entendimiento común.
Valiéndose de este subterfugio de instalar sus fábricas bajo otros nombres, Huawei tecnologías tendría la habilidad de eludir las restricciones impuestas por el gobierno estadounidense y adquirir de manera indirecta la valiosa tecnología para la producción de chips. Es un movimiento que bien podría ser digno de una trama de espionaje.
Mirando en perspectiva, este giro tiene implicaciones importantes para la relación entre Estados Unidos y China. Tal vez no sea un paso bien orquestado y, definitivamente, no ayudará a aliviar las tensiones. Hay que tener en cuenta que en este entorno económico globalizado, un error puede tener efectos de amplio alcance.
Finalmente, no podemos omitir el impacto que puede tener este cambio en el equilibrio de la industria de semiconductores. Esto puede obligar a muchas empresas a reevaluar sus estrategias. En relación con esto, puedes ver un análisis en profundo en nuestro blog sobre la ‘aprobación de ETFs de Bitcoin por parte de la SEC‘. En definitiva, estamos presenciando la nueva versión de «La Guerra Fría», patrocinada por el mundo de las finanzas y la tecnología.

Fuente de la noticia: https://www.reuters.com/technology/huawei-is-building-secret-network-chips-trade-group-warns-bloomberg-news-2023-08-23/

La información que te facilita Ficoach.pro debes usarla bajo tu propia responsabilidad. No somos asesores financieros ni damos consejo de inversión, únicamente transmitimos información valiosa para ti que debes usar bajo tu propia responsabilidad.