Previsión de tasas de interés de la Reserva Federal y el BCE en 2024

1. Introducción

El escenario financiero aguarda ansioso los anuncios de la Reserva Federal de EE.UU y del Banco Central Europeo. Antes de zambullirnos en las proyecciones para 2024, repasamos el paisaje actual.

• La Reserva Federal, siempre enigmática, desvelará este miércoles su última resolución sobre las decisiones de tasas de interés. Jerome H. Powell, su presidente, liderará posteriormente una conferencia de prensa. Aunque algunos tientan el destino pronosticando un último ajuste en las tasas, la mayoría de los inversores resguarda sus pronósticos, esperando pruebas convincentes.
• El FMI, por su parte, esboza un futuro económico disminuido para EE.UU, con un 2,1% de crecimiento en 2022, reduciéndose a un 1,8% en 2023 y un modesto 1% en 2024. Los consumidores estadounidenses parece que comenzarán a flexibilizar su gasto conforme la curva de las tasas de interés continúa ascendiendo. Como profundizamos en el artículo «Resiliencia del mercado laboral de EE.UU ante las subidas de tasas de interés»

Fijemos ahora nuestra mirada en la zona euro con un crecimiento estimado de apenas el 0,9% este año, debiendo principalmente este magro avance a Alemania. Sin embargo, hay un atisbo de optimismo con un esperado crecimiento del 1,5% para 2024.

• El Banco Central Europeo, persistente en su objetivo de aumentar las tasas de interés durante el último año, tiene la intención de elevarlas a cotas no vistas desde principio de siglo, buscando controlar la indeseada inflación. Sin embargo, las señales de que su política restrictiva podría estar frenando el crecimiento económico genera inquietud, particularmente debido a que los indicadores económicos muestran cierto declive.

El próximo año promete ser un campo de batalla económico. Cada maniobra será crucial y cualquier tropiezo costoso. Dostoyevski decía que «el futuro es un enigma«; si al menos los bancos nos diese la respuesta, nos evitaríamos muchos quebraderos de cabeza. Pero, lástima, solo podemos esperar y jugar en este tablero financiero global.

2. La decisión de julio de la Reserva Federal

El miércoles se presenta cargado de expectativas, con Jerome H. Powell, mandamás de la Reserva Federal de EE.UU, preparado para desatar sus declaraciones. No olvides tener a mano las palomitas; su conferencia de prensa —precedida por la crucial decisión de tasas de interés de julio— promete mantenernos en vilo. ¿Habrá un nuevo incremento para 2023? Todo depende del comportamiento de la inflación y la economía de EE.UU. Toda una verdadera obra de suspense económico, en la que inflación y salud financiera son los protagonistas.

El FMI, por otro lado, difumina su pronóstico económico para el futuro. A su juicio, la economía estadounidense desacelerará de un auge del 2,1% este año, a un 1,8% en 2023 y apenas un 1% en 2024. Ante la posible escalada de los tipos de interés, parece prever que el consumidor norteamericano ponga freno al gasto.

No olvidemos la zona euro, que transita a un ritmo de crecimiento económico del 0,9% este año. Alemania, desafortunadamente, arrastra su progreso. Aunque la perspectiva es de recuperación con un crecimiento del 1,5% para 2024. Así lo veíamos en la Resiliencia del mercado laboral de EE.UU ante las subidas de tasas de interés.

El Banco Central Europeo ha estado elevando las tasas de interés tratando de contener el ímpetu de la inflación. Sin embargo, la economía muestra señales de resentirse ante esta política restrictiva, y los analistas prevén un parón en el alza de los tipos de interés por parte del BCE.

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En resumen, no te pierdas el discurso de Jerome H. Powell este miércoles. Más allá de la tradicional política financiera, las decisiones y datos macroeconómicos nos sumergen, a veces, en thrillers de alta tension.

3. Pronóstico del FMI para la economía de EE. UU.

El FMI nos ha dejado a todos perplejos al airear sus previsiones económicas para los Estados Unidos. Y mientras nos inquieta la idea de que la Reserva Federal de EE.UU. pueda incrementar las decisiones de tasas de interés, el FMI vaticina un enfriamiento en la economía de EE.UU.. De un crecimiento del 2,1% en 2022, predice un descenso al 1,8% en 2023 y posteriores desplomes hasta el 1% en 2024. ¿La razón? Los jugosos ahorros americanos, acumulados por los cheques de estímulo, podrían empezar a escasear y, de forma paralela, las tasas de interés podrían elevarse.

Ya se sabe que hay una conexión casi fatal con el consumo. Si en economía la máxima es «cuando hay dinero, hay fiesta«, ¿qué sucede cuando la pecera empieza a secarse? Ante la posible desaparición de los ahorros estadounidenses y el incremento de las tasas de interés, es probable ver cómo el consumo comienza a tambalearse.

• En Europa, la situación no pinta mejor. Con una sombría expectativa de crecimiento del 0,9% este año, atribuible en parte a los traspiés económicos de Alemania, mirar hacia una recuperación del 1,5% en 2024 parece un sueño lejano. El Banco Central Europeo, en una lucha épica contra la inflación, planea elevar las tasas de interés a máximos no vistos desde antes del siglo XXI. Pero, las alarmas de que tal política restrictiva podría entorpecer el crecimiento económico, podrían forzar al BCE a aflojar el ritmo.

• Parece que Jerome H. Powell, presidente de la Reserva Federal, y sus homólogos del BCE, tendrán todavía mucho teatro por delante, malabareando con tasas de interés y crecimiento económico para no desestabilizar la economía global. Y aunque a nosotros la economía nos pueda parecer un laberinto, no envidiaría estar en la piel de estos titanes de la economía. Después de todo, «A quien algo quiere, algo le cuesta«. Así que, estemos listos para las vueltas bruscas que pueda dar el errático DJ de la economía. Pero mientras la música siga sonando… ¡A bailar!

Los retos a los que se enfrenta la economía mundial están bien ilustrados en nuestro artículo anterior sobre la Caída del 1% en Precios del Petróleo por Reactivación de Campos Libios y Crecimiento Económico en China más Bajo de lo Esperado.

4. Situación económica en la zona euro

En el tablero económico de la Eurozona, nos hallamos ante un juego complicado y lleno de tensiones. Este año, el crecimiento esperado es más bien escueto, apenas un 0.9%, ensombrecido por el retroceso económico en Alemania, el peso pesado de la región. No obstante, se anticipa un alza hacia el año 2024, con una proyección de crecimiento ascendente de 1,5%.

• El dilema alemán

  Alemania, como gran actor económico de la Eurozona, tiene la capacidad de modificar el rumbo financiero del grupo. Hoy día enfrenta el embate de un retroceso económico que amenaza su estabilidad. Aún así, se encuentra lidiando con la situación, tomando acción para incentivar su recuperación y reducir el efecto colateral en la economía de la eurozona. Muestra de ello es su resistencia económica, respaldada por un sólido mercado laboral y la disminución de los precios energéticos.

• Las tácticas del BCE frente a la inflación

  Por su parte, el Banco Central Europeo (BCE) se posiciona contra la inflación. Se prevé que el BCE lleve las tasas de interés a cotas no vistas desde el año 2000. A pesar de haber aumentado las tasas de interés en el último año, se vislumbra la desaceleración en el incremento de éstas, ante las evidencias de que su política restrictiva podría estar frenando el crecimiento económico. Paradójicamente, su principal arma para combatir la inflación podría generar un muro que entorpece en vez de favorecer el crecimiento económico.

En síntesis, el entorno económico en la Eurozona no es ideal y el camino hacia la recuperación total es difícil. Pero, no todo es sombrío. Con las decisiones tomadas por Alemania y las maniobras efectuadas por el BCE, es posible proyectar un fortalecimiento y recuperación hacia el 2024. Y los inversores, ¿observarán con paciencia el devenir del panorama o buscarán otros destinos financieros para sus inversiones? Sólo el tiempo nos dirá.

5. Conclusión

Cuando el sol se pone tras un día de desafíos financieros, el escenario nos deja a la Reserva Federal y al Banco Central Europeo como los titiriteros responsables del escenario económico mundial. Esto nos incita a preguntarnos: ¿Se asemeja todo esto a una partida de ajedrez con piezas que obedecen a intereses ocultos?

• Jerome H. Powell y su equipo de la Reserva Federal parecen estar inmersos en un juego de escapismo con la economía estadounidense. La actualización de las tasas de interés parece estar en el último lugar de su lista de tareas; necesitan ver la inflación debilitarse y la economía estabilizarse antes de decidirse a actuar.
• En consecuencia, entramos en 2024 con un aire de incertidumbre. Observamos como el crecimiento de Estados Unidos se reduce del 2,1% en 2022, al 1,8% en 2023, llegando apenas al 1% en 2024. Todo esto se mezcla con un consumo en declive, a causa de la disponibilidad limitada de ahorros y los crecientes intereses. ¿Veremos a los grandes almacenes sin su habitual delirio de compras? Es una posibilidad real.
• Por otro lado, en Europa, liderada por los estrategas del BCE, la situación nos deja un aroma a estancamiento con un ligero tinte de mejora. Prevén un crecimiento de apenas el 0,9% para este año, aunque pronostican una subida al 1,5% para el 2024. Aquí el combate contra la inflación se encuentra con la resistencia económica, sumiendo a la eurozona en un océano de incertidumbre y expectativa.

Los responsables del BCE se encuentran en el dilema de moderar la inflación y decidir hasta dónde subir los intereses. Si se pasan, podrían entrar en un juego en el que terminan por inhibir el crecimiento económico.

Así, los diseñados para salvaguardar la economía, pueden convertirse en obstáculos para el crecimiento. Nos hallamos expectantes, viendo donde terminarán por caer las piezas del tablero económico global en 2024.

Amigos, queda claro que el futuro económico parece incierto. ¿Será 2024 un año de caída libre y valentía o será quizás un aterrizaje suave y listo para el próximo desafío? Nos resta aguardar y observar los pasos que darán los gigantes de la economía global.

Fuente de la noticia: https://www.nytimes.com/2023/07/25/business/economy/imf-world-economic-outlook.html