Deflación en China: Consecuencias y Desafíos Económicos
La deflación, aunque puede parecer atractiva, es una preocupación económica significativa, mucho más difícil de manejar que su contraparte, la inflación. Esta semana, las alarmas económicas sonaron cuando los precios al consumidor en China cayeron un 0,3% respecto al año anterior. A pesar de que el poder adquisitivo aumenta durante la deflación, este fenómeno puede llevar a un ciclo económico negativo similar al ocurrido durante la Gran Depresión. La deflación dificulta el pago de deudas, lo que puede conducir a quiebras y desempleo. Además, incita a las personas a posponer sus compras, esperando una mayor caída de precios, lo que reduce aún más la demanda y presiona a la baja los precios. En este escenario, el remedio más utilizado es que el gobierno inyecte dinero a la economía para incentivar el gasto, aunque, como en el caso de China, las elevadas deudas públicas pueden complicar esta acción.