¿Son los Planes BNPL una respuesta al Estrés Financiero?
Los planes «Compra ahora, paga luego» (BNPL, por sus siglas en inglés), están creciendo en popularidad, un indicativo quizás del creciente estrés financiero que sufren los consumidores. Este tipo de planes son básicamente préstamos que se pueden pagar en cuatro o menos plazos, habitualmente ofrecidos en las compras online. Según la Reserva Federal de Nueva York, los usuarios de estos planes se dividen en dos: financieramente estables y financieramente frágiles. Este último grupo, entre cuyos miembros encontramos a aquellos con una puntuación de crédito inferior a 620 o con atrasos de más de 30 días en un préstamo, tienen más tendencia a hacer uso de los planes BNPL de manera recurrente. En concreto, el 60% de los usuarios financieramente frágiles han utilizado el producto más de cinco veces en el último año, mientras que el tamaño de las compras es otro factor que marca la diferencia entre estos dos tipos de consumidores.
Por otro lado, los resultados también resaltan que para muchos consumidores, el primer uso de los planes BNPL puede representar la principal barrera. No obstante, una vez que se supera, tienden a recurrir a él con más frecuencia. Aunque se podría considerar que los planes BNPL pueden ser una herramienta útil si se utiliza de forma adecuada y se paga puntualmente, también puede convertirse en un arma de doble filo si no se cuida el manejo de estos créditos. Además, el creciente uso de las tarjetas de crédito y los atrasos en los pagos representan factores que pueden amplificar el estrés financiero, especialmente en el grupo de edad de 18 a 39 años, con una mayor propensión a ser arrendatarios.