-
Introducción
- La inflación, aunque ha bajado desde su pico de inflación del 9.1% en junio de 2022, sigue siendo más del doble que la media de inflación antes de la pandemia. Esto significa que los gastos diarios como la comida y el alquiler son significativamente más caros.
- Para los que luchan contra las deudas de tarjeta de crédito, algunas opciones a considerar pueden ser la solicitud de una menor tasa de interés, una reestructuración de su presupuesto para atender las deudas y mejorar su puntuación de crédito.
- En esta batalla contra las deudas, la elección consciente y un plan puede ser el antidoto. Así como el viejo refrán sugiere, «no hay mal que por bien no venga«, esperemos que este contexto angustioso pueda conducir a un uso más inteligente de nuestras finanzas.
-
Deuda en tarjetas de crédito: cifras y contexto
- Cambio de rumbo en la tendencia de la deuda
Resulta irónico que hace apenas tres años, gracias a los pagos de estímulo durante la crisis sanitaria de la COVID-19, observamos una acelerada cancelación de deudas con tarjetas de crédito. Parecía que la economía había puesto el freno al crecimiento del endeudamiento, pero para sorpresa de todos, la deuda con tarjetas regresa con ímpetu al panorama financiero, superando la marca del billón de dólares. -
Incremento en las tasas de interés
Al adentrarnos en el análisis, descubrimos que este crecimiento es especialmente inquietante debido al nuevo pico en la tasa de interés anual promedio de las tarjetas de crédito, situada ahora en un 20.53%. En términos más claros, esto implica que si se tiene una deuda de 5000 dólares, un estadounidense tomaría cerca de 309 meses y tendría que pagar alrededor de 21,537 dólares sólo en intereses para liquidar el saldo a través de pagos mínimos. -
Sumamos a este escenario una persistente, y nada insignificante, inflación. La carga financiera a largo plazo para los endeudados comienza a parecerse a un mal sueño difícil de superar.
«El significado e impacto de estas cifras no deben tomarse a la ligera, en particular para los hogares de bajos ingresos que ya luchan para hacer frente a las fluctuaciones de precios. Pese a que la Reserva Federal ha decidido, por el momento, no incrementar las tasas de interés, la realidad para los titulares de tarjetas de crédito no parece prometedora en un futuro próximo.» -
Implicaciones económicas y sociales
- La solución para esta enredada crisis reside, según los expertos, en acciones como solicitar una menor tasa de interés, elaborar un presupuesto estricto que permita manejar las deudas y trabajar en la mejora de su puntuación de crédito.
-
Es crucial entender que la educación financiera es la herramienta más potente para evitar caer en terribles abismos de endeudamiento porque nadie está exento de tener una urgencia que nos force a coquetear con el peligroso fuego de la deuda, sin contar que, a menudo, resultamos quemados.
-
Estrategias para afrontar la deuda récord
- Comienza por revisar tu presupuesto. Necesitas saber en qué gastas tu dinero para poder enfrentar la deuda. No te sugiero dejar de tomarte tu café mañero, pero tal vez prepararlo en casa y ahorrar ese gasto diario te permita amortiguar tu deuda. Analiza cada gasto, podría ser la diferencia entre el alivio financiero y el ahogo económico.
-
Posteriormente, considera formas de mejorar tu calificación crediticia. Más allá de los miedos creados en torno a las tarjetas de crédito, un buen puntaje puede favorecer la negociación de términos más favorables con tu entidad bancaria. Mejorarlo gradualmente puede abrirte puertas a tu favor.
-
Incítame a insistir en la importancia de atreverte a negociar una menor tasa de interés. Las entidades financieras, en ocasiones, muestran mayor flexibilidad de lo que pensarías, y si mantienes un buen historial de pagos y relación con ellos, cabe la posibilidad de negociar una reducción de la tasa.
-
Si las tácticas anteriores no son efectivas, considera alternativas como transferir el saldo de tu tarjeta a una con 0% de interés o abrir una cuenta de ahorro de alto rendimiento para beneficiarte de altas tasas de interés. Para entender mejor este último punto, puedes leer este artículo sobre el Impacto de las Subidas de Interés de la Reserva Federal en los Certificados de Depósito.
-
Conclusión
- «La inflación, si bien perdida vigor desde el 9.1% de junio 2022, sigue obstinada y dobla al promedio de antes del Covid. Elementos esenciales como la alimentación y la vivienda empiezan a gravitar con demasiado peso en nuestras finanzas.»
- «Lo cierto es que no se ve por ningún lado el armisticio financiero. Quienes tengan deudas de tarjeta deben estar despiertos, y considerar opciones para que esta situación no les arrastre. Revisar presupuestos, priorizar la mejora de la puntuación de crédito y buscar alternativas a la deuda de tarjeta, todo esto se convierte imprescindible para mantener a raya nuestras finanzas en una era tan volátil.»
- «Importante destacar que endeudarse más para combatir precios mayores solo provoca más problemas. Quienes arrastran una deuda de unos 5.000 dólares, con las tasas actuales de interés, supondría algo así como 309 meses y más de 21.500 dólares en intereses para liquidarla. ¿De verdad quieres ese embrollo?»
En un país donde «el tiempo es oro«, parece que estamos hundidos en un mar de deuda con tarjetas de crédito. Por desgracia, esta observación cínica refleja una realidad que se convierte en titular alarmante. Según un informe reciente de la Reserva Federal de Nueva York, las deudas alcanzaron un récord de deuda de 1 billón de dólares en el segundo trimestre de 2021.
Hace tan solo tres años, muchos estadounidenses, con pagos de estímulo COVID-19 por la pandemia, se apresuraban a saldar sus deudas de tarjeta. Ahora, el viento ha cambiado de dirección. La persistente inflación y las crecientes tasas de interés empujan a las personas a depender cada vez más de sus tarjetas de crédito, con los inherentes riesgos que ello conlleva. Para comprender mejor este impacto, puedes leer nuestro artículo sobre el impacto de las subidas de interés de la Reserva Federal.
El interés anual medio que se aplica a las tarjetas de crédito ha llegado a un nuevo récord de 20.53%. Este porcentaje exorbitante suma un gran carga financiera para aquellos que se ven obligados a usar sus tarjetas para compensar los precios elevados causados por la inflación, aumentando considerablemente la presión financiera, especialmente para los más vulnerables.
«`html
Las nuevas estadísticas revelan un alarmante récord en la deuda con tarjetas de crédito, que ha superado el billón de dólares en el segundo trimestre de 2021, tal como indica el informe de la Reserva Federal de Nueva York. Este hito parece eclipsar el anterior récord de 986 mil millones de dólares, reflejando una peligrosa tendencia de incremento en las obligaciones financieras.
Para obtener más detalles sobre la influencia de las decisiones de la Reserva Federal en la economía, consulta nuestro artículo sobre el Impacto de las Subidas de Interés de la Reserva Federal en los Certificados de Depósito.
«`
La deuda con tarjetas de crédito creciente en Estados Unidos se ha transformado en un feroz monstruo que amenaza particularmente a los hogares con ingresos más reducidos. Es notorio que ciertos estadounidenses, especialmente los que viven en el suroeste, se encuentran en apuros económicos similares a las tensas tramas de la serie ‘Breaking Bad’, buscando de manera desesperada formas de producir ingresos para paliar sus enormes deudas causadas por un consumo que sobrepasa sus ingresos.
En un estado de asuntos ideal, la deuda es manejable. Sin embargo, los informes del Banco de la Reserva Federal de Nueva York muestran la severa realidad de que la deuda crediticia ha alcanzado un nuevo récord de deuda de 1 billón de dólares en el segundo trimestre de 2021, doblando la cifra previa a la pandemia.
Varias cuestionan los motivos de este acelerado crecimiento de la deuda, y la respuesta se encuentra en ese intrigante personaje que denominamos inflación. Esta inasible figura ha disparado los precios, obligando a numerosos ciudadanos a contraer deudas con sus tarjetas de crédito.
Esta deuda adquirida como medio para sobrellevar los precios elevados viene con una contrapartida a largo plazo: aumento de tasas de interés, con una tasa de interés anual promedio del 20,53%. Esta situación empuja a la gente en un ciclo aparentemente interminable. Por ejemplo, un individuo que tenga una deuda de 5000 dólares necesitará más de 25 años para pagarla si realiza el pago mínimo, y finalmente gastará más de 20,000 dólares en intereses.
Es especialmente preocupante la realidad de los hogares estadounidenses con bajos ingresos, que son los más golpeados por estos precios exorbitantes. Están atrapados en una deuda sin fin debido a su interacción creciente con el indeseado plástico.
Aprende más sobre el impacto de las subidas de interés de la Reserva Federal aquí.
El temor a la deuda puede resultar abrumador, especialmente cuando enfrentas tasas de interés exorbitantes del 20,53% vinculadas a las tarjetas de crédito. ¿Cómo te enfrentas a este reto? Aquí te ofrezco algunas estrategias para aliviar esa presión financiera.
«Recuerda, la meta no es solo cancelar la deuda, sino vivir libre del miedo que ésta produce. La vida es mucho más que preocupaciones financieras. Incluso en momentos de crisis, siempre existen estrategias a emplear para recobrar la estabilidad. No te desanimes. Analiza tu situación, explora tus opciones y actúa. Este podría ser tu primer paso para liberarte de las ataduras de la deuda.»
La deuda con tarjetas de crédito en Estados Unidos ha alcanzado, tras un despiadado vuelco de los acontecimientos, el imponente dato de 1 billón de dólares. Y, aunque nuestras coordenadas nos sitúen en Europa, créanme, este asunto tiene repercusiones universales: la inflación desbocada y el aumento constante de los intereses. Los mismos ogros que perpetúan su soledad con nuestras alicaídas cuentas bancarias.
Quienes más sufren son las familias de bajos ingresos en suelo estadounidense, pero seamos realistas, todos estamos en este transatlántico llamado economía global que parece ir a la deriva. El tasa de interés anual promedio de las tarjetas se halla en un máximo histórico del 20.53%.
Es momento de mantenerse alerta, de actuar mientras se puede. Revisar nuestras finanzas y buscar formas de reducir los endeudamientos y mejorar los puntajes de crédito, aunque moleste, es claramente mejor que dejarse arrastrar por la corriente.
Por tanto, apreciado lector, recordemos ese viejo proverbio: «Cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar». Sigamos de cerca lo que ocurre con la economía norteamericana, aprendamos y tratemos de evitar una suerte similar.
Fuente de la noticia: https://www.foxbusiness.com/economy/credit-card-debt-set-hit-one-trillion-inflation-continues-squeezing-americans