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Introducción
- Desde la crisis financiera de 2008 no presenciábamos tal cataclismo financiero. ¿Las causas? Bien, esto es un cóctel complejo en el que la elevada inflación y la revalorización del dólar estadounidense frente a otras divisas han jugado un papel principal en esta tragedia financiera. Ahora bien, en toda tormenta hay quien sabe mantener el rumbo, como el sector inmobiliario, sólido frente al vendaval.
- Norteamérica y Europa, las zonas más ricas, han recibido el golpe más duro con una reducción de su riqueza en $109 billones combinados. En cuanto a los mercados, el dudoso honor del peor rendimiento es para Estados Unidos, seguido de Japón, China, Canadá y Australia.
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No todo son malas noticias, también tenemos a aquellos que han sabido sortear la tormenta: Rusia, México, India y Brasil han conseguido incrementar sus fortunas en un año de incertidumbre.
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Contexto global de la disminución de la riqueza
- Suena a una trama de Hollywood, pero es nuestra realidad. Esta caída es solo una consecuencia de la bonanza de 2021. Los principales enmascarados en ese guion son la inflación, el incremento en las tasas de interés y la depreciación de la moneda.
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Pero no pierdas la fe. Las proyecciones del Global Wealth Report pronostican un salto del 38% en la riqueza global en los próximos cinco años. Así que mantén firme tu estrategia de inversión, ya que la economía, al igual que la existencia, es una montaña rusa. Y si tienes alguna duda, tu balance bancario puede darte algunas pistas.
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Análisis por regiones
- No obstante, algunos lograron resistir la embestida del dólar. Antes de delinear quiénes son los ganadores, hagamos un breve análisis de las pérdidas por mercados.
- Los Estados Unidos han absorbido la mayor parte de estas. Junto a ellos se alinean otros grandes actores como Japón, China, Canadá y Australia, afectados crucialmente por la apreciación del dólar estadounidense, la creciente inflación y las tasas de interés.
- No todo es desolación. Parte del paisaje se ilumina con varios mercados emergentes que, desafiando pronósticos, han evidenciado ganancias notables. En este escenario, algunos gigantes claudicaron frente a un mercado emergente menos poderoso, pero decididamente sólido.
- Con un rendimiento extraordinario, Rusia se corona como el país con mayores ingresos del año. Detrás, con una vitalidad igualmente encomiable, se ubican México, India y Brasil.
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Proyecciones futuras
- En cuanto a las pérdidas económicas, Estados Unidos se lleva la palma, seguido de cerca por Japón, China, Canadá y Australia.
- Pero para contrarrestar este paisaje sombrío, Rusia lleva la contraria y logra los mayores beneficios del año pasado.
- Siguiéndole el paso, se encuentran México, India y Brasil.
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Conclusión
- Sin embargo, no todo es sombrío. En lugar de caer en pesimismo, visualicemos otro panorama: frente al espejo, el reflejo del futuro nos muestra un incremento del 38% en la riqueza global en los próximos cinco años. ¿No parece un panorama más alentador?
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El informe Global Wealth se proyecta más optimista. Pronostica un aumento significativo del patrimonio mundial en un futuro no muy lejano: ¡un retorno a los dorados días de prosperidad!
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A pesar del desalentador 2022, persiste un halo de esperanza. El mercado financiero es como una rueda siempre giratoria, e impredecible. Rusia, seguida de México, India y Brasil, son ejemplos de esta volatilidad, pero también un destello de esperanza hacia la recuperación económica.
Iniciamos el 2023 con una advertencia poco agradable; el informe Global Wealth Report, presentado por Credit Suisse y UBS, descubre una realidad que bien podríamos apodar como ‘La Gran Contracción’. No, no estoy hablando de la famosa obra de Stephen Hawking, sino a un suceso igualmente inquietante, la disminución de la riqueza mundial en 2022. Sí, amigos, no es un error, ni un resabio de la celebración navideña, es un hecho constatado; la riqueza privada total descendió un 24% hasta los $4544 billones. Para los amantes de los datos concretos, esto implica que la riqueza por adulto se redujo un 36% hasta los $84,718. Tómense un momento para asimilarlo.
La pregunta es ¿qué nos deparará el próximo episodio de esta saga financiera? A pesar del desastre en 2022, los economistas se mantienen optimistas proyectando un crecimiento del 38% de la riqueza mundial en los próximos cinco años. Yo, por mi parte, ya he marcado en mi calendario el día en que se publicará el próximo informe Global Wealth Report.
Para aquellos interesados en el rendimiento de China, pueden leer sobre ‘Deflación en China: Consecuencias y Desafíos Económicos‘ en nuestro blog anterior.
Ser franco es mi carta de presentación y sí, 2022 ha sido un reto para nuestras economías. Tras la efervescencia del 2021 en la saga del era COVID-19, el planeta ha sufrido un golpe en sus arcas, equivalente a la crisis financiera 2008. Informes de Credit Suisse y UBS pintan un cuadro que nos pone nerviosos.
Nuestra adorada riqueza mundial cayó un 24%, quedando en un escuálido $4544 billones debido a la inflación alta y al fortalecimiento del dólar estadounidense ante otras monedas. Fue un impacto especialmente sentido en las regiones doradas de Europa y Norteamérica. En este declive, los activos financieros fueron la mayor carga, mientras los no financieros, bienes inmuebles en su mayoría, mostraron su resistencia frente a la agitación de las tasas de interés.
El panorama se parecía a una partida de ajedrez global. Estados Unidos lideró en pérdidas, con Japón, China, Canadá y Australia pisándole los talones. Aunque no todo fue desesperanza: Rusia, el robusto oso, tuvo el mayor crecimiento, seguido de cerca por México, India y Brasil.
Para más detalles sobre la situación en China, puedes leer nuestro artículo sobre la Deflación en China: Consecuencias y Desafíos Económicos.
El año recién pasado nos dejó una inusual contracción global en riquezas que no experimentábamos desde la crisis financiera de 2008. Los territorios más adinerados, como Norteamérica y Europa, recibieron el mayor golpe, con la riqueza privada total cayendo cerca de un 24%, situándose en unos 4544 billones de dólares. El economista astuto Anthony Shorrocks, coautor del informe, achaca esta merma a una inflación desbocada y a un dólar estadounidense que cobró mayor fuerza frente a otras monedas.
Este receso en la generación de riqueza durante el 2022 no debe ensombrecer las proyecciones futuras. En un tono optimista, el informe anticipa un crecimiento del 38% en la riqueza mundial en los próximos cinco años. Después del descenso, parece que se avecina un despegue esperanzador.
Resulta sorprendente el cambio de rumbo que puede tomar el viento en un espacio corto de tiempo. Hace apenas un año, celebrábamos una etapa de crecimiento económico sin igual en plena pandemia. Pero el 2022 irrumpió en la escena con movimientos inesperados, mostrándonos su faceta más desafiante. Calma, que no todo está perdido, aún hay lugar para el optimismo.
El último informe de Credit Suisse y UBS nos ha dejado perplejos, no lo voy a negar. La riqueza mundial en 2022 cayó un 24%, hasta los $4544 billones, un impacto que deja al público sin aliento. La riqueza por adulto sufrió una caída apabullante del 36%, una secuela del fortalecimiento de la moneda estadounidense y de una inflación alta que se nos escapa de las manos. Como siempre, las zonas más pudientes, Norteamérica y Europa, han absorbido la mayor parte de los golpes.
Aún en aguas turbulentas, algunos logran aprender a navegar.
Lejos de resignarnos, el Informe sobre la Riqueza Global augura un renacimiento económico con un crecimiento del 38% en los próximos cinco años. Así que, después de todo, el panorama no parece tan sombrío.
A pesar del final desalentador en el escenario económico de 2022, el guion de los años venideros sugiere un cambio de dirección. ¿Será acaso el inicio de una sinfonía más animada?
Afianza tu agarre y súbete a este viaje lleno de giros y revueltas. La economía global está a punto de despegar. ¿Estás listo para el viaje? No te puedes bajar, las emociones económicas están garantizadas.
Iniciamos 2022 como un turbulento vuelo que desestabiliza el bienestar económico mundial. Pero, ¿quién se lanza al vacío por unos cuantos sacudones?
Este año, marcado por el fortalecimiento del dólar estadounidense y una inflación alta, ha devorado un buen bocado de la riqueza mundial. Según informes de Credit Suisse y UBS, la caída es de un 24%, y hasta un 36% en la riqueza por adulto. Los más golpeados son los acaudalados de Norteamérica y Europa, pero a escala global, Estados Unidos sigue siendo el líder de este desfavorable ranking, seguido por Japón, China, Canadá y Australia.
Entonces, aunque 2022 marque la primera caída global de riqueza desde la crisis financiera 2008, no hay que dar voces de alarma. Después de la tormenta siempre llega la calma, y este es solo el final de un capítulo de un libro en curso. Así que, prepárate para lo que viene, quizás nos aguarde un final feliz.
Para entender más sobre el impacto de la depreciación de la moneda, puedes leer nuestro artículo Deuda récord en tarjetas de crédito en EE.UU: Impacto e ideas para afrontarlo.
Fuente de la noticia: https://www.foxbusiness.com/economy/global-wealth-drops-first-time-2008